Lo primero que resalta del manifiestito -lo de manifiesto les queda grande- es que todos los firmantes están en situación de Retiro. Es decir, que no arriesgan ni la promoción en sus carreras, ni sus destinos, ni sus nóminas. Me recuerdan un anuncio publicitario, de hace muchos años, de la Dirección General de Tráfico: «Conduce, pero seguro». Esto es igual: patriotas, pero seguros.
El manifiestito alerta sobre los peligros que la acción del Gobierno supone para la Unidad de España y «para nuestra Democracia». Al parecer, la Unidad y la Soberanía de España no han estado antes en peligro. Debe ser que los capones firmantes del manifiestito, además de emasculación, sufren de amnesia colectiva, porque no firmaron declaración alguna -y, por edad, muchos de ellos estaban en activo y eran Oficiales de Carrera- cuando el Felón entregó el Sáhara Español -Provincia española- a Marruecos y Mauritania por presiones de EEUU. Esa felonía sucedía el 14 de Noviembre de 1975 -con el Generalísimo a las puertas de la muerte-. El 22 de Noviembre -ocho días después-, el Felón era proclamado Rey y los Capones de los Ejércitos le juraban fidelidad. Era lógico: tan traidores a España eran el Felón como sus Cipayos. Tampoco objetaron nada cuando se legalizó al Partido Comunista, cuando se aprobó la Ley de Reforma Política y se dio inicio a la Transición-Traición, que suponía romper Orden Jurídico-Político del Nuevo Estado, cuando la Corrupción -del Felón, Jordi Pujol y compañía- se instauró en nuestra patria y la saqueó, o cuando el Estado Autonómico ha resquebrajado a la Nación Española.
España no tiene Ejércitos. El R78 la ha privado de ellos. Los Ejércitos de Capones de los años de la Transición han sido sustituidos por una Fuerza Cipaya obediente a USA. Los únicos valedores de España son los patriotas intransigentes, a los que «nuestra Democracia, ‘Su Majestad’ y el Orden constitucional» nos importan una higa.
https://cadenaser.com/ser/2020/12/05/tribunales/1607181627_160051.html
Una última cosa: Cipayos, meteos el manifiestito por donde os quepa. Ya sabéis por donde.
Pedro Pablo Peña