Hoy, ha recogido el requerimiento de ingreso en prisión Iñigo Pérez de Herrasti, uno de los 14 de Blanquerna. Inalterable, consciente que la prisión que se sufre por la acción militante es un acto de servicio a España.

Corría el año 2013, el llamado Procés estaba en marcha, impulsado por Artur Mas y una Clase Política canallesca, al amparo de la debilidad de la Corona y de las Instituciones del Estado -ocupadas por los partidos políticos del R78, auténtico nido de traidores a la patria-. El Procés tenía un propósito declarado: la «desconexión de Cataluña respecto de España», la Independencia de Cataluña. Un crimen contra España.

En ese contexto, unos patriotas españoles irrumpen, el 11 de septiembre de 2013, en la Librería Blanquerna, en la que se iba a celebrar la Diada de Cataluña con un carácter separatista, con el único propósito de protestar contra aquella infamia ante la pasividad de los Poderes Públicos. 

Aquella acción, un simple escrache, ha sido penado por los Tribunales del Régimen Borbónico con Dos años y Seis meses de prisión. 

El Procés, iniciado en el año 2013, culminó el 1° de octubre de 2017 con la Declaración Unilateral de Independencia de Cataluña y la proclamación de la República Catalana. El crimen de lesa patria estaba consumado.

Tras un proceso judicial bochornoso, con el Tribunal Supremo sometido al Poder Ejecutivo, los principales autores de la Traición fueron condenados por un delito de Sedición -no de Rebelión- y un delito de malversación. Estos son los condenados:

-Jordi Sánchez. 9 años de Prisión.

-Jordi Cuixart. 9 años de Prisión.

-Oriol Junqueras. 13 años de Prisión.

-Carmen Forcadell. 11 años de Prisión.

-Raúl Romeva. 12 años de Prisión.

-Dolors Bassa. 12 años de Prisión.

-Josep Rull. 10 años de Prisión.

-Jordi Turrul. 12 años de Prisión.

El 22 de junio de 2021, el Consejo de Ministros presidido por Pedro Sánchez les concedía a todos el indulto.

Seis meses después de ese indulto, los patriotas de Blanquerna deberán ingresar en prisión por denunciar la traición flagrante a España. Traición activa por parte del Separatismo catalán, y traición pasiva -por permisividad- por parte de la Corona, el Gobierno de la Nación, el Congreso y el Senado y la Fuerza Cipaya.

El patriotismo es un camino de sacrificio. Pero, siempre da frutos: «Quieren enterrarnos sin saber que somos simiente».

Pedro Pablo Peña.